Durante las ausencias de su padre Bárbara se convirtió al Cristianismo e hizo abrir una tercera ventana en la torre como símbolo de la Santísima Trinidad.
Dióscoro decidió entregar a su hija a uno de los príncipes que la pretendían atraídos por la leyenda de su extraordinaria belleza y, ante la negación de Bárbara, enfurecido, la llevó a la cima de un monte y él mismo la decapitó. Inmediatamente después un rayo le fulminó.
Desde entonces, la santa es invocada como protectora durante las tormentas.
La reconoceremos fácilmente porque se la representa con una Torre y una Espada.
Santa Bárbara es la Patrona de los Mineros, Artilleros y Canteros.
El Patronazgo de la Artillería se remonta al año 1.248 cuando el Infante Alfonso, futuro Alfonso X el Sabio, conquistó Alicante y su fortaleza el 4 de Diciembre. El castillo, en lo alto del monte Bencantil, fue consagrado a Santa Bárbara.
CAPILLA DE SANTA BÁRBARA
En el Claustro de la Catedral Vieja de Salamanca el Obispo Juan Lucero fundó y pagó la construcción de una capilla en 1.334, dedicada a Santa Bárbara, para acoger su sepultura.
Hasta 1.843 se celebraban allí los exámenes de Doctorado de la Universidad de Salamanca. El aspirante a doctor velaba sus libros la víspera bajo el candil que suspendía del techo... Los doctores le examinaban al día siguiente y si consideraban que merecía el título, salía por la puerta de la Catedral y marcaría su éxito en los muros con un Vítor de sangre de toro.
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